Wednesday, August 15, 2007

UN SILENCIO QUE DUELE


El silencio definitivamente me lleva a lo profundo de mí, intento escapar para no encontrarme con ese Christian que a veces me asusta, pero no puedo, es mi naturaleza y ahí sigo descubriendo y aceptando lo que únicamente se aprende con un viaje al interior.

El domingo acompañe en un retiro de silencio de un día a un grupo de personas, siempre es una experiencia nueva y en estos encuentros con la oración logro conectar un cable a tierra (cielo debería ser) con lo que vivo a diario. Esta vez fue diferente y aunque su desarrollo se hizo como habitualmente los resultados no fueron esa paz que normalmente encuentro cuando me enfrento de cara mi Señor. La tristeza se fue apoderando de mi como un vértigo que me devoraba.

Tenia claro el origen, pero me negaba ha sentirme así, por lo cual comencé rápidamente mi rutina de escape, un par de llamadas a amigos, una buena película, etc. Pero un libro me dio la clave, por qué en vez de reprimirla no mirarla a la cara?. Por qué no descubrir la belleza que hay en una emoción como esta?

Desde el domingo que estoy pololeando con la tristeza y la energía que contiene esta relación me ha hecho estar más atento, para descubrir la vida misma.

Wednesday, August 01, 2007

Un fuego que enciende otros fuegos




En el 2004 me regalaron un libro con este título y que es una recopilación de discursos, homilías y arengas del Padre Hurtado, que tenían como objetivo motivar, principalmente a los jóvenes, en el compromiso social con lo más necesitados. Sus mensajes realmente son motivadores y encienden el fuego de la solidaridad y el amor por lo demás a quien los escucha o lee con detenimiento.

El fuego del amor del Santo por su prójimo, se propago con un reguero de pólvora en mucha gente y aun se sigue propagando en un mundo cada vez más individualista, pero que tiende gracias a la tecnología, a ir formando comunidades y trabajando colaborativamente, lo que necesariamente le devuelve el sentido a la palabra solidaridad.

Reflexionando sobre el incendio que sufrimos hace dos meses, me vino a la memoria este libro, ahora con un fuego tan real que nos paralizo por unos días, se despertaba la solidaridad y el cariño de tanta gente que nos cambio por completo la perspectiva de la tragedia. Realmente el fuego encendió otros fuegos que se manifestaban en el cariño y la solidaridad que recibimos Milena, Rodrigo y yo, por lo cual escribí esta nota para El Morrocotudo.AQUI

Debe ser por la cercanía de agosto y la conversa con mi madre hoy, que me he puesto a pensar en la solidaridad y a recordar a tanta gente que nos mostró su cariño los primeros días de junio. Ha sido maravilloso este fuego despertó en todos ustedes la necesidad de expresarnos su afecto y cariño y en nosotros el agradecimiento y una nueva mirada que tenemos de este camino juntos. Gracias Señor por esto